Los puentes colgantes están dentro de las tipologías de puentes más antiguas. El elemento portante es un cable (o una cuerda) flexible. Dado que los cables son capaces de absorber grandes esfuerzos de tracción a pesar de tener un peso propio relativamente pequeño, se pueden construir puentes colgantes con grandes luces. Esto permite salvar grandes distancias sin necesidad de pilares, por ejemplo para atravesar barrancos o cañones. La deformada de los cables de sustentación de un puente colgante es de forma parabólica, ya que el peso llega a los cables de sustentación por medio de tirantes a distancias constantes y relativamente cortas.
El montaje experimental SE 110.18 representa un puente colgante. El puente consta de dos cables de sustentación paralelos y una calzada colgada de ellos. Ganchos en forma de U sirven de tirantes. Están dispuestos a distancias regulares en los cables de sustentación y soportan la calzada. Poleas fijas actúan como pilones.
La calzada actúa como carga de línea sobre los cables de sustentación y se puede cargar con pesas adicionales. Dos calzadas de rigidez diferente están disponibles: una calzada rígida y una calzada elástica. La calzada rígida tiene una articulación en el centro. Esta articulación permite observar momentos en la calzada, que se originan en caso de carga asimétrica: la calzada se dobla.
El montaje experimental sin calzada estudia cables suspendidos. Para estudiar cables de peso propio diferente, se aplican cargas puntuales adicionales directamente en los cables de sustentación.
Las esfuerzos de tracción se aplican mediante pesos. La flecha máxima se mide con ayuda de una regla graduada. La regla graduada se fija a un travesaño.
Las piezas que componen el equipo de ensayo se guardan de de forma racional y bien protegidas en un sistema de almacenamiento. El montaje experimental completo se monta en el bastidor SE 112.